SAN JOSÉ (AFP). Las autoridades de Costa Rica concluyeron este domingo la operación de retorno de unos 500 costarricenses varados en bloqueos que mantenían indígenas panameños desde hace seis días en la vía que comunica a ambos países, según el gobierno.La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, recibió en el aeropuerto Tobías Bolaños, al oeste de la capital, a un grupo de los 504 costarricenses que son trasladados desde el sábado, precisó la Casa de Gobierno en un comunicado.
"Suman 504 los costarricenses que fueron traídos por el Gobierno en un operativo humanitario tras permanecer varios días en la zona del conflicto en Panamá", señaló un comunicado oficial.
Los costarricenses, la gran mayoría turistas y transportistas, quedaron varados en los bloqueos de vías en las provincias panameñas de Veraguas (oeste) y de Chiriquí, fronteriza con Costa Rica, principalmente en la Carretera Interamericana, que conecta a Panamá con el resto de Centroamérica y vital para el comercio.
La policía de Panamá desalojó este domingo con gases lacrimógenos los bloqueos, tras violentos enfrentamientos con los indígenas, que dejaron al menos un indígena muerto, más de una treintena de detenidos y unos 40 detenidos.
Los indígenas de la etnia Ngäbe Buglé, la mayor de Panamá, exigen que un proyecto que debate el Congreso prohíba la construcción de hidroeléctricas y la explotación de yacimientos mineros en sus territorios.