
Repudiaron lo que denominaron "el acto de cobardía del Gobierno Nacional", refiriéndose a los asesinatos de dos indígenas durante los enfrentamientos de principios de enero. "Todos somos iguales y todos tenemos derecho a la vida", expresó Dileyka Rodríguez, dirigente estudiantil.
Anunciaron la habilitación de un centro de acopio para que tanto estudiantes como ciudadanía en general deje alimentos y agua embotellada para ser distribuida entre los indígenas que se mantienen en vigilia en el Parque Legislativo.
No descartaron cierres de calle. "No podemos establecer que no se darán cierres de calle, si se dan es porque al pueblo se le reprime", explicó Rodríguez.